La Generalitat cambiará los criterios para beneficiarse de la deducción fiscal incrementada por inversión en vivienda habitual que existe en Cataluña, una decisión que afectará a un tercio de los beneficiarios actuales, unos 250.000, según datos de 2014.
El cambio normativo, pactado con la CUP, se introducirá en la ley de acompañamiento de los presupuestos de 2017 y consiste, en la práctica, en que aquellos contribuyentes que tengan una base imponible de más de 30.000 euros, y que sean mayores de 32 años, dejarán de beneficiarse de una deducción por vivienda habitual del 1,5 % que estaba incluida en el tramo autonómico del IRPF.