La economía mantuvo su tibio ritmo de crecimiento en el tercer trimestre del año tanto en la zona del euro como en el conjunto de la Unión Europea (UE), a un paso aún más lento del que marcaba a principios de año, debido en buena medida al moderado progreso de Francia, Alemania e Italia.
Así lo muestran las primeras estimaciones publicadas hoy por la oficina comunitaria de estadística, Eurostat, que apuntan a que de julio a septiembre el PIB de los diecinueve países que comparten la moneda única se expandió un 0,3 % respecto a los tres meses anteriores.