El par GBP/USD experimentó un rebote de cobertura corta el jueves y subió casi 150 pips desde la zona de 1.2040, o el mínimo diario tocado tras la decisión política del Banco de Inglaterra. El impulso llevó a los precios al contado a un máximo de tres días, en torno a la zona de 1.2280-1.2285 durante los inicios de la sesión americana.
El movimiento positivo intradía del dólar estadounidense perdió fuerza tras la publicación de los decepcionantes datos macroeconómicos de EE.UU., que, a su vez, se consideraron un factor clave que ofreció soporte al par GBP/USD. El Departamento de Comercio de EE.UU. informó de que los inicios de construcción de viviendas disminuyeron un 14.4% y los permisos de construcción cayeron un 7% en mayo. Además, el índice de difusión de la actividad general actual del Banco de la Reserva Federal de Filadelfia cayó a -3.3 en junio desde el 2.5 de mayo. Los datos se sumaron a la preocupación por el debilitamiento del crecimiento económico estadounidense y provocaron algunas ventas en torno al dólar.
Sin embargo, los elevados rendimientos de los bonos del Tesoro de EE.UU., reforzados por las expectativas de la Fed, deberían ayudar a limitar cualquier retroceso más profundo del dólar. El presidente de la Fed, Jerome Powell, dijo el miércoles que el banco central estadounidense está "absolutamente decidido" a mantener las expectativas de inflación ancladas en el 2% y reafirmó otra gran subida en julio. Además, el llamado diagrama de puntos mostró que la proyección mediana de fin de año para el tipo de los fondos federales subió al 3.4% desde el 1.9% de la estimación de marzo y al 3.8% en 2023. Esto, junto con el impulso de la aversión al riesgo, podría dar soporte al dólar como refugio y limitar el par GBP/USD, al menos por ahora.
Aparte de esto, las expectativas de que el Banco de Inglaterra opte por un enfoque más gradual de la subida de los tipos de interés en medio de los temores de recesión podrían actuar como un viento en contra de la libra esterlina. Los toros también podrían ser reacios a hacer apuestas agresivas en medio del estancamiento del Reino Unido y la UE sobre el Protocolo de Irlanda del Norte del acuerdo del Brexit. El contexto fundamental favorece a los operadores bajistas, lo que sugiere que cualquier movimiento alcista posterior corre el riesgo de desvanecerse rápidamente. Por lo tanto, será prudente esperar a una fuerte compra de seguimiento antes de confirmar que el par GBP/USD ha formado un suelo a corto plazo.