España registró más defunciones que nacimientos en 2015, cuando la cifra de recién nacidos fue la más baja en 13 años, según datos estadísticos conocidos el martes que sitúan de nuevo al país en crecimiento vegetativo negativo.

Según el Instituto Nacional de Estadística, el año pasado nacieron en España 420.290 niños, un 1,7 por ciento menos que en 2014, año que rompió la tendencia decreciente desde 2008 en el número de nacimientos. Frente a este dato, hubo 422.568 defunciones el año pasado, un incremento del 6,8 por ciento frente a 2014 y el número más alto desde que empezaron los registros estadísticos en 1941.