Tu cerebro es una fábrica de hacer excusas
Tu cerebro se encarga de que tú nunca tengas la culpa de tus malas inversiones. ¿Cómo? Pues fabricando excusas. Los mecanismos de defensa en forma de excusas están relacionados con el exceso de confianza. Cuántas veces hemos oído que “si no llega a ser por esa pésima presentación de dividendos de la empresa”, o “los mercados me tienen manía: cuando entro largo caen, si entro corto suben”, o “no vendo porque tienen que subir, sólo es cuestión de esperar”, o “los broker cometen muchos fallos en mi cartera”, o…
La fábrica de hacer excusas tiene un sinfín de ellas para todas y cada una de las situaciones que nos suceden tanto en los mercados como en la vida cotidiana. Seguro que tú puedes contarnos unas cuantas que tu cerebro ha fabricado para ti.