El nombre de Kim Kardashian siempre está en boca de todos y esta vez no es diferente, la socialité gastó una impresionante fortuna personalizando sus autos para que hicieran juego con su hermosa mansión.

La artista gastó un suma de dinero impresionante para combinar sus autos de lujo con su mansión.

La empresaria indicó que había personalizado recientemente su colección de autos de lujo para que combinen con la apariencia de su casa de Los Ángeles.

Su mansión está realizada en tonos neutros y así personalizó sus autos, para que hagan juego de manera minimalista.

La empresaria muestra su vivienda en un video junto a sus tres autos, un Lamborghini, un Rolls Royce y un Mercedes-Benz, pintados con el color gris que su vivienda.

“Siempre he sido una chica de autos, amo los autos y realmente quería algo diferente. Quería que mis autos se mezclaran con mi casa que es gris. Así que hice todos los autos grises”.

Kardashian gastó en este evento más de US$ 100,000. La empresa Platinum Motorsports de Los Ángeles, fue la empresa encargada de realizar este trabajo, indicando que el color es un “gris Rolls-Royce muy específico”, que no suele estar disponible.

Cada vehículo se desarmó para poder pintar cada pieza por separado para otorgarle un perfecto acabado original, por lo que se llevó un mes realizar el proceso en cada unidad.

El Lamborghini Urus de Kim, está valorado en US$ 218,000, siendo el más difícil de personalizar puesto que cuenta con un kit de carrocería complejo.

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Un Rolls Royce Ghost se comercializa en US$ 311,000, mientras que un Maybach Sedan tiene un precio de US$ 185,950.

Kim Kardashian indicó que su mansión tenía detalles estéticos minimalistas muy bien ejecutados y la definió como un “futurista monasterio minimalista”.

Ella y su ex esposo Kanye West realizaron su vivienda con el reconocido diseñador belga Axel Vervoordt. Al momento de construirla gastaron unos US$ 40 millones en 2014 y gastaron otros US$ 20 millones renovándola.

La casa en su interior es bastante sencilla y minimalista. Vervoordt indicó que : “Querían algo totalmente nuevo. No hablamos de decoración, sino de un tipo de filosofía sobre cómo vivimos ahora y cómo viviremos en el futuro. Cambiamos la casa purificándola y seguimos presionando para hacerla cada vez más pura’’.

El diseñador que también ha realizado las casas del actor Robert de Niro o Bill Gates, creó un oasis de pureza y luz con materiales totalmente naturales como la madera o la piedra. Con un mobiliario en piezas de Royère y Pierre Jeanneret.