El cóctel previsto para 2017 formado por un dólar fuerte, tipos de interés al alza y amenazas proteccionistas no es, en absoluto, un buen augurio para las economías emergentes. Sin embargo, hay un factor que juega a favor de algunos de estos mercados como es la recuperación del precio de algunas materias primas. “La mejora de las commodities favorece asimétricamente a los emergentes. Los productores de estas, básicamente economías latinoamericanas, son los favorecidos, mientras que los países asiáticos quedan generalmente al margen de esta mejora debido a que son más bien consumidores de materias primas antes que productores de ellas”, explican en Bankinter.