La presidenta del banco de fomento al desarrollo del Gobierno brasileño, María Silva Bastos, renunció hoy al cargo alegando "motivos personales" pero su salida agrava aún más la crisis que enfrenta el presidente Michel Temer, acorralado por denuncias de corrupción.
La presidenta del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) alegó "motivos personales" para renunciar al cargo tanto en el escueto comunicado divulgado por el organismo como en la carta que le envió a los funcionarios del principal brazo financiero para los proyectos de desarrollo del gobierno brasileño.