Los datos japoneses en estos días han sido bastante decepcionantes, con cifras pobres relacionadas con la industria que alimentan la preocupación por el crecimiento económico de Japón. El calendario estadounidense fue bastante escaso en medio del cierre del gobierno que mantiene cerradas a la mayoría de las oficinas de estadísticas. Cuanto más largo sea el apagado, más distorsionados serán los números una vez que regresen. Seguro que será complicado, y lo más probable es que afecte negativamente al dólar.
A pesar de lo anterior, Wall Street registró sólidas ganancias por cuarta semana consecutiva, brindando apoyo a la pareja, ya que los informes de ganancias de los bancos y las especulaciones sobre el progreso en la relación comercial China-EE. UU. factores de riesgo. Los índices de Estados Unidos subieron a máximos de 1 mes el jueves luego de un informe que sugiere que EE. UU. Podría aumentar los aranceles a las importaciones chinas, un gesto para acelerar las negociaciones y motivar al país asiático a ofrecer más concesiones. La noticia indicó que la idea provino del Secretario del Tesoro Mnuchin, y en contra del Representante de Comercio de los Estados Unidos, Lighthizer, que lo ve como un signo de debilidad. Más tarde fue rechazado por el Departamento del Tesoro, pero la mayoría de los activos correlacionados se aferraron a las ganancias generadas por el titular.