El último lote de datos de Alemania y de la Eurozona confirma la debilidad actual en el área con una Alemania que probablemente caerá en una recesión técnica (dos trimestres de crecimiento negativo), después de que los pedidos de fábrica alemanes fallaron en cumplir con las expectativas bajistas y se desplomaron aún más en territorio negativo. La confianza de los inversores de la Eurozona recientemente publicada también se hundió aún más en territorio negativo, alcanzando un mínimo de seis años, alimentando aún más los temores de una recesión a pesar del reciente recorte de tasas del BCE y un nuevo paquete de flexibilización cuantitativa. Los datos de producción industrial alemanes saldrán mañana y las cifras de exportaciones alemanas el miércoles probablemente confirmarán esta imagen negativa.